DE
CAMINO
Querido Destino;
te he estado esperando
la estación quedó vacía,
todo el mundo había subido a su tren
pero tú no llegabas.
Deshojé cinco margaritas
y descubrí dos dragones y una bota
en el cielo,
me bebí un chocolate
-amargo-
de la máquina de la esquina
mientras te buscaba entre los pasajeros.
No puedo darte más tiempo
pasan de y media
he comprado un billete
y mi tren parte en breve.
Me hubiera gustado tenerte a mi lado
para charlar durante el viaje
de las penas y alegrías que llevo en mi maleta.
No ha podido ser,
tenía que coger mi tren y no habías llegado.
Espero que corras lo suficiente para alcanzarme.
Te espero en la siguiente parada.
Post data:
date prisa, los trenes nunca esperan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario